domingo, 25 de noviembre de 2012

Hombre introspectivo. Perseverancia



Este es el segundo trabajo escultórico que he realizado, se trata de una escultura compositiva, 
la he titulado "Hombre introspectivo. Perseverancia".
Tiene 285 cm.de altura y 180 cm. de ancho.



Detalles del elemento inferior:
Es un cuerpo hecho con madera de sapelly y posteriormente cubierto con triángulos de hierro de 1,5 mm. de grosor.
La parte inferior del cuerpo está cubierta de lamas de hierro de 1,5 mm. de grosor, de ésta sale una punta de hierro forjado de 3 x 3 cm.de grosor en la base y 60 cm. de largo.
Aunque en las fotos no se aprecia, la punta, además de estar inclinada hacia delante, está también inclinada hacia el lado derecho.





Estas son algunas fotos del proceso que he seguido.

Elemento inferior de la escultura.



Aquí se puede ver la forma que tiene.





Las primeras puntas











Uno de los dos anclajes que sirven de unión con los vástagos. 



Esta es la parte superior de la escultura.
Le he dado forma de yugo.







Extremo roscado de uno de los vástagos



Momentos antes de ensamblar las tres piezas






4 comentarios:

  1. La parte de abajo es impresionante, un trabajo de chinos.
    Un abrazo.

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  2. Hola Yolanda, qué tal?.
    Si que ha tenido trabajo, son muchas puntas las que he atornillado, pero ha merecido la pena, también me gusta como ha quedado.
    Un saludo.

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  3. No sé por qué, en el primer vistazo imaginé tu escultura pequeña, más pequeña de lo que luego me has demostrado con otras perspectivas. Un trabajo minucioso, detallista, muy elaborado, quizá también agreste.

    Me gusta la perseverancia. Abre puertas imposibles.
    Un saludo.

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    1. Hola Ana. Es verdad, en la primera foto al no haber ningún punto de referencia no se aprecia su verdadero tamaño. Vista al natural invita a acercarse.
      Me gusta lo de "agreste". Hay cosas y situaciones que cuando se les quita los adornos y parafernalias resultan eso: ásperas, incultas y llenas de maleza, tal cual han sido siempre.
      Quien mantiene las puertas cerradas también puede ser perseverante...
      Un saludo.

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